una ubicación ideal cerca de una estación de tren, del centro de la ciudad y también de transbordadores. pedimos el almuerzo en blended by daan, situado no muy lejos del lugar. habitación de buen tamaño con un hervidor eléctrico y una nevera. camas cómodas en un cuarto cómodo.

Desayuno completo y variado. Habitación amplia con terraza.3. Cama y baño cómodos.4. Prismáticos en la habitación.

Que no pude quedarme más tiempo.

Un servicio excelente, proporcionan un parking público y WiFi gratis;))

El desayuno era recién preparado y sabroso, había una gran selección de comida riquísima. Habitaciones bien equipadas y bellamente decoradas, el diseño es bonito. Un hotel fantástico con una ubicación céntrica en el puerto.

Estuve alojado en este encantador hotel en Friesland y tengo que decir que quedé muy satisfecho con mi estancia. En primer lugar, la ubicación en el pintoresco centro antiguo de la ciudad fue simplemente perfecta. Desde mi habitación en el primer piso, tenía unas vistas impresionantes al puerto, lo que hizo que mi estancia fuera aún más especial. Además, el desayuno fue excepcional, con una amplia variedad de opciones para todos los gustos. Me encantó poder elegir los huevos a mi gusto y había disponible una gran variedad de zumos, lácteos y delicias tanto saladas como dulces. Sin duda, el hotel prestó atención a los detalles al proporcionar prismáticos en la habitación para poder disfrutar aún más de las vistas desde la terraza.

Está claro que este hotel se preocupa por la comodidad de sus huéspedes, pero sería aún mejor si tuviera ascensor. Aunque el personal fue amable y se ofreció a ayudarme con mi maleta, las escaleras empinadas no son ideales para alguien que viaja con mucho equipaje.

Las habitaciones son espaciosas y tienen vista al puerto. El personal del hotel brinda un excelente servicio de atención al cliente. El parking público en la propiedad es muy útil para quienes viajan en coche.

Fui a un pequeño pueblecito en Friesland y me encantó mi estadía en un hotel encantador. La ubicación era perfecta, cerca del centro, del puerto y justo en el canal. La habitación en la que me alojé estaba en el último piso y era amplia, con una terraza grande que ofrecía unas vistas increíbles. La cama era muy cómoda y el baño, aunque sencillo, estaba limpio y en buen estado. El desayuno fue estupendo, con una buena variedad de opciones, desde huevos hechos a tu gusto hasta zumos y alimentos salados y dulces. La atención y el servicio del personal fue amable y servicial. La única desventaja fue que no había ascensor, pero el personal amablemente se ofreció a ayudarme con mi maleta grande.